Taza de Pizarra

Al fin es viernes! esa es la traducción del encabezado. Y es que después de una semana de prácticas larga, hoy es día de explayarse y salir un poco por Steinkjer. No es que hayan pasado muchas cosas desde el último post, pero algo hay por contar:

Ayer, volviendo para Stod después de las prácticas, a escasos kilómetros de la casa, la rueda delantera de La Bestia sufrió un reventón, así que, cuando llegué por fin al dulce hogar, comprobé que efectivamente, el neumático había sufrido un percance, así que tuve que reemplazarlo por la rueda de repuesto. Observé que al sacar el neumático del maletero no había ni rastro del gato, por lo que tuve que ir la vecina a pedirle el dichoso armatoste. Y menudo armatoste me dejo: un gato hidráulico de gran tamaño (se nota que estos noruegos deben de cambiar las ruedas de verano y las ruedas de invierno). Problema solucionado. Bruno 1 – Rueda de recambio 0.

Las prácticas de idioma en el centro de ancianos de Kvam van viento en popa. Poco a poco voy comprobando que la inmersión lingüística va yendo a su propio ritmo y estoy cogiendo agilidad en mi expresión oral. Aún cuesta entender a los ancianos, pero como he dicho antes, tiempo al tiempo. Debo decir que la jefa del centro esta complacida conmigo y valora positívamente mi actitud abierta a aprender y absorber conocimientos lingüísticos. Es muy reconfortante notar que estas avanzando con pequeños pasos y que no solo esa sensación sea subjetiva, sino también, que las enfermeras, las auxiliares y hasta la propia jefa del centro lo noten. Sigamos avanzando, sigamos mejorando. Stein på stein.

Dependiendo de como esté el tiempo (variable a más no poder), y para mantener el contacto y salir un poco de la rutina de aquí, hemos pensado organizar una pequeña excursión por las cercanías, con picnic campestre incluido y la mar de sofisticado: En el supermercado hemos comprado dos engansgrill, una especie de barbacoa portátil de un solo uso. Por supuesto, no podía faltar la carne y las salchichas. Un plan redondo, solo esperando, eso si, que el tiempo acompañe.

Volviendo al día de hoy, aprovechando que es viernes, Carlos y yo hemos hemos vuelto a Steinkjer para pasar el fin de semana con las chicas, lavar nuestra ropa (en Stod aun no tenemos en condiciones la lavadora, así que, toca hacer viajes para ese cometido), hablar con Håvard sobre la rueda del coche y sobre la situación actual de mi apartamento en Kvam (que más tarde, me ha confirmado que hasta el día 7 de julio, seguiré conviviendo con Carlos en Stod) y para salir esta noche. El lugar de destino, el Madame Brix o, como no, el Onkel Oskar, el único bar/pub/discoteca del pueblo. Eso si, para amenizar la velada, hemos ido a comprar unas cervezas. Y aquí, por unas cuantas coronas, te compras las cervezas de lata… de un litro. Como salen más a cuenta que ir a tomar una pinta en el Onkel Oskar (esta cuesta 75 coronas, unos 10 euros) mejor llevar la fiesta nosotros que ir a la fiesta nosotros. No sé como estará el ambiente esta noche, supongo que más bien tranquilo, pero para eso ya estamos nosotros en Steinkjer, para animar un poco las veladas noruegas. Ya os informaré en el próximo post. Quien sabe, uno sabe como empieza el día, pero no como acabará la noche.